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Ya conocía al olvido, al enojo y a la soledad.
nos hablabamos de .tú . y me jugaban la paciencia
sabian de mi situación y sin embargo, conciencia,
cuentos, mentira y congruencia ahorcaban mi corazón
más intácta la razon, mis actos aun sabios regía,
Hasta que llegó aquella (arpía, impía, fría, mujer, mi vida) fin a mi sueño le dió.
...Creí que aun tenia las riendas. -coño- -me equivocaba-
la susodicha mandaba y -yo no me había dado cuenta-
Dispuesto estaba a ofrecerme-(un corazón en oferta)
pero cuanto cuesta decir que un mal día, partió
partió sin razon, con mi ser.
llevando consigo la prenda, que habia ofrecido en oferta.
sin pagar ¡con nada!, en bancarrota quedé.
...